Walter Wischnivetzky: “Nos gusta gestionar y es lo que sabemos hacer”

Las elecciones de este 2023 en la Argentina determinarán que en Mar Chiquita habrá un nuevo intendente y el gran candidato a ocupar el principal cargo ejecutivo de la municipalidad es Walter Wischnivetzky, de profesión arquitecto y actual Secretario General de la comuna.

‘Wini’ es el apodo elegido recientemente para la persona respaldada por el intendente Jorge Paredi, quien decidió no volver a postularse a un nuevo mandato.

Con experiencia en la elaboración de pliegos de licitación de obras y en la representación técnica de inversiones públicas y privadas, Wischnivetzky llega al período electoral completamente inmerso en la gestión pública de la que es parte hace más de 20 años.

En la previa de su presentación como precandidato de Unión por la Patria en Mar Chiquita, Wischnivetzky habló con Telégrafo del complejo desafío por venir.

 

 

-¿Cómo se desarrollará el trabajo elaborado en el plan estratégico de Mar Chiquita?

-El plan estratégico fue el principio de la escucha. Fue una lógica de seguir los dictados de los vecinos para planificar los próximos 10 años del partido. Eso claramente es una foto, pero la vida no es una foto, es una película, y nosotros vamos a seguir interactuando con los vecinos en los próximos 10 años si nos apoyan para ir concretando cada uno de esos temas.

Hay muchas cosas que surgieron que nosotros ya teníamos en cartera y planificadas, y muchas otras que gratamente nos sorprendieron y nos obligan a afilar el ojo y a gestionar. Eso es lo que nos gusta, es lo que sabemos hacer, que es gestionar que las cosas pasen.

 

Presentaron en Mar Chiquita el plan estratégico 2022-2032

 

-¿En qué estado encontraron al partido de Mar Chiquita hace cuatro años?

-Lo encontramos muy endeudado. Nosotros nos fuimos en diciembre del 2015 con 814 empleados municipales y cuando volvimos había 1.284 trabajadores sin nuevos servicios. Cuando uno incrementa los servicios necesita más personal y está bien, pero cuando los incrementás porque sí, no se entiende. Además había 700 becados, 96 funcionarios municipales, entre ellos 24 asesores. Es decir, un despropósito absoluto, un desmanejo. También se volvieron a habilitar basurales a cielo abierto que nosotros habíamos logrado cerrar y se abandonó la lógica de separación en origen de los residuos en un convenio con Mar del Plata.

En resumen, se retrocedieron cuatro años. Costó el arranque, sumada la pandemia, pero estamos ahora en plena gestión, hemos creado 10 nuevos servicios educativos en 43 meses, se han hecho obras de infraestructura troncales, como el acueducto, el polideportivo, obras de cloaca y agua, ahora con la noticia que nos dio el Enargas para lograr nuevas habilitaciones de gas, no solo para los 800 vecinos que estaban esperando el servicio desde hace años, sino para volver a soñar con que se retomen las obras en ese rubro en Mar de Cobo y se extienda la red por Camet Norte y en Atlántida. Serán los primeros objetivos, aunque obviamente en un lapso largo de tiempo porque son inversiones que requieren mucha proyección y una gran gestión de financiación.

 

 

-¿En caso de que la ciudadanía acompañe y sean gobierno, qué más se proyecta para Mar Chiquita?

-Seguir así, que Mar Chiquita no se detenga. Hemos avanzado con obras de infraestructura, pero falta mucho. Pensemos que el partido es el cuarto de la provincia de Buenos Aires que más creció en su población, un 64% entre los dos últimos censos. Eso es un desafío enorme ya que hay que acompañarlo con infraestructura para dar calidad de vida. Hemos creado esos 10 servicios educativos e igual siguen haciendo falta más. Por ejemplo en La Caleta pensamos crear un polo educativo, porque la verdad que hace falta por crecimiento propio de la localidad.

En esta gestión creamos un jardín de infantes, una escuela primaria, otra secundaria técnica, un Instituto Superior de Formación Técnica, un centro educativo universitario. Se hizo un laburo enorme de acompañar el crecimiento con infraestructura y vamos a seguir en esa senda.

 

 

-¿Cuán importante es en este marco contar con el apoyo de los gobiernos provincial y nacional?

-Cuando nosotros hablamos con los vecinos y les pedimos el voto, que es lo que uno hace en estas épocas electorales, lo que solicitamos es que se vote la lista completa. Para nosotros, y quedó demostrado durante la gestión de Jorge Paredi, estar alineado políticamente con los gobiernos provincial y nacional facilita las cosas. En caso de no ser así vamos a gestionar igual y resolver las problemáticas del vecino, pero es mejor para Mar Chiquita que Sergio Massa sea el presidente y que Kicillof siga en la gobernación.

 

 

-¿Cómo avizorás tu gestión con la dicotomía que existe en Mar Chiquita en cuanto a las zonas del mediterráneo y de la costa?

-Ese debate se salda con gestión. El mediterráneo, por su dinámica de crecimiento, tiene mucha más infraestructura que lo que tiene la costa, pero durante estos últimos años se trabajó muchísimo en equiparar esa situación, como decía antes, con infraestructura troncal como la del acueducto, la del gasoducto y la de las redes finas de cada uno de los servicios, por ejemplo con las cloacas, que logramos la conexión al emisario submarino desde Santa Clara del Mar, lo que permite abrir un horizonte de crecimiento en esa red para todo lo que es la costa sur del partido. Es decir, se equipara con gestión y después haciendo acciones de unidad con los más chicos.

En cada cosa que hacemos, nosotros integramos. El partido de Mar Chiquita es uno solo y así tiene que ser. Sí estamos notando que hace 15 años en el mediterráneo había entre 10.000 y 11.000 habitantes y la costa tenía entre 7.000 y 8.000. Actualmente el mediterráneo sigue teniendo entre 11.000 y 12.000 residentes pero la costa ya tiene más de 23.000. Entonces eso requiere una mirada desde el gobierno municipal que acompañe ese crecimiento. Eso no implica desatender nada, sino potenciar. No hay que dividirse, sino multiplicarse.